“The Fragile Feast” es una de las exposiciones “de moda” con la que se ha inaugurado el nuevo año en la capital. El Espacio II de Ivorypress nos deleita esta vez con un pequeño bocado del largo trabajo de la fotógrafa Hannah Collins (Londres, 1956); una notable aportación al estudio de la simbiosis entre artes visuales y culinarias, gracias a la colaboración de Ferrán Adrià, sin el cual este “frágil festín” fotográfico probablemente no hubiera alcanzado su consecuente repercusión mediática.
Hannah Collins, Retrato de Ferrán Adrià |
A través de este proyecto, la célebre fotógrafa y videoartista documental, no solo ha inmortalizado más de una treintena de ingredientes de la cocina del celebérrimo chef, sino también aquellos lugares en los que pueden encontrarse algunas de estas curiosas materias primas, convertidas en manjares (kuzu japonés, cítricos, anémonas, sésamo, soja, miel de abejas…), lo que ha embarcado a la artista en un viaje por los parajes más recónditos de Europa, América Latina y Japón.
El resultado completo, un menú de 250 fotografías, expuestas el pasado otoño en la sala Banco Herrero de Oviedo, de las cuales la galería del matrimonio Foster muestra algo menos de una veintena. Acompaña especialmente esta pequeña degustación el volumen editado por Hatje Cantz, que se presenta en Ivorypress el próximo 24 de enero junto a una conferencia de los dos maestros: una edición especial que además de todas estas imágenes, recoge tanto los textos de la artista que completan la comprensión, sentido e idiosincrasia de estas rutas, como doce recetas de este gran gurú de la gastronomía mundial.
Hannah Collins, “Miso 2011 (tiramiso from freeze dried tofu, soya paste, sake freezed-dried soya sauce, soya jelly)” |
Residente entre Londres y Barcelona, Hannah Collins recibió hace casi veinte años la nominación al célebre y polémico premio Turner. Desde entonces, ha inspeccionado temáticas variadas, aunque casi siempre incidiendo en temas sociales (La Mina, 2001-2004; Current History, 2006; Parallel, 2007) y sobre todo, en la memoria e historia de determinados entornos culturales, como es el caso de “The Fragile Feast”, en el que realmente se nos cuentan historias previas a la elaboración de cada plato: el proceso previo de indagación, de búsqueda del elemento selecto y de la técnica perfecta; algo que puede acontecer tanto en las artes visuales como en la cocina de autor. Es en este ámbito de investigación de la memoria, del pasado… en el que Collins se ha proclamado como una de las artistas visuales británicas más reconocidas, tal y como lo avala la representación de su obra en algunas de las instituciones y colecciones más célebres tanto de España como del panorama internacional (ARTIUM, Fundación la Caixa, CAC Málaga, Tate Modern, Centre Georges Pompidou, etc.).
Hannah Collins, “Citrus 7, 2011 (farm)” |
Puede que después de contemplar la exposición el espectador se quede con una sensación insípida, de no llegar a alcanzar el valor sensorial de estas apreciadas sustancias, o que por el contrario, se sienta embriagado por un exotismo poco común. Es probable que se sienta tentado a adquirir el libro, o que vuelva a desear ser sorprendido al menos una vez por el arte culinario del Sr. Adrià. Lo que es más que seguro es que no dudaremos de la contribución de esta distinguida obra a la reflexión sobre la fusión arte+gastronomía. El frágil festín, o “delicado banquete” de Hannah Collins, aunque más completo en este caso en la edición impresa que en la enmarcada, nos ofrece a través de esta exposición un aperitivo que podrá catarse al menos hasta el próximo 4 de febrero.
Más información en:
http://www.ivorypress.com/
Artículo accesible también a través de la colaboración con:
http://www.nicolamariani.es/
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http://www.nicolamariani.es/
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